domingo, 28 de febrero de 2010

Infusiones (Parte II)


La variedad de infusiones cada vez es mayor. Aunque no sea muy frecuente su consumo, prefiriendo bebidas con gas, zumos o cafés, las infusiones son mucho más que manzanilla y té.

- INFUSIONES DIGESTIVAS: Aunque la manzanilla sea la protagonista de las plantas digestivas, hay una variedad muy amplia (anís, menta piperita, poleo hinojo, comino, canela, hierba luisa, melisa, regaliz...). Son las indicadas para cuando aparece después de comer sensación de estar excesivamente llenos, o para molestias estomacales.

La combinación de varias plantas potencia su efectos. También estimulan el apetito o favorecen las digestiones lentas (para lo que se recomienda tomarlas media hora antes de la comida).

Por lo general, se deben beber calientes porque parte de sus propiedades se vinculan a los aceites esenciales que concentran y que se evaporan al enfriarse la infusión.

- INFUSIONES LAXANTES Y DIURÉTICAS: El efecto de las plantas diuréticas y laxantes sobre el exceso de grasa corporal es nulo, y conviene ingerirlas bajo prescripción facultativa. La reducción de peso y la disminución del volumen que se puede experimentar se debe a una diuresis forzada con pérdida de agua y electrolitos, y a una deposición más frecuente y consistente, en el caso de las infusiones laxantes, pero en absoluto se elimina grasa.
Las plantas laxantes irritantes son seguras y eficaces, pero sólo si se beben de forma puntual y en la dosis aconsejada, para tratar un estreñimiento pasajero, pero no crónico. Producen desequilibrios electrolíticos con pérdida de potasio, por lo que se desaconseja su empleo habitual.

Los efectos de plantas diuréticas son suaves en comparación con los fármacos diuréticos, y pueden ser efectivas si se administran cuando se tiene la sensación puntual de retención de líquidos. Sin embargo, para eliminarlos no hay un diurético más efectivo que el agua. Además, la utilización habitual de infusiones diuréticas y sin control profesional puede enmascarar un trastorno de retención de líquidos debido a una patología renal, de corazón u hormonal.

- INFUSIONES RELAJANTES: Dentro de las plantas con acción relajante y sedante, las hay con efectos más suaves pero suficientemente efectivas para tratar el insomnio, el nerviosismo y la irritabilidad, como la tila, la flor de azahar o la manzanilla.
En estos casos, al efecto relajante propio de la planta se une la sensación de bienestar que acompaña la ingesta de líquido caliente. Plantas como la valeriana, la pasiflora o el espino blanco inciden con más intensidad sobre la relajación del sistema nervioso y la disminución de la actividad cerebral y de la frecuencia cardiaca. En estos casos, hay que consultar al médico si se están tomando medicamentos antidepresivos o ansiolíticos por que pueden potenciar su acción.


FUENTE IMAGEN: LA HORA DEL TÉ.

1 comentario:

  1. Me gustan mucho las infusiones y he descubierto que hechas en leche, en vez de agua, muchas están deliciosas. Buenas y sanas sustitutas de la deseada cafeína.
    :)

    ResponderEliminar